SERIE: 3 RETOS PARA LA JUVENTUD

1. Un retrato de los Jóvenes de Hoy


Propósito de la Lección: Que los jóvenes sean desafiados a analizar sus vidas para que se esfuercen en algo que dé buen fruto.
Enseñanza Bíblica: Salomón analiza todo lo que persiguió y el fruto que dieron estos afanes.

Pasaje Bíblico: Eclesiastés 1:16-18
Enseñanza Bíblica: Salomón analiza todo lo que persiguió en su vida y el fruto que dieron estos afanes, y percibe que todo era correr tras el viento.
Propósito de la Lección: Que los jóvenes sean desafiados a analizar sus vidas y afanes para que se esfuercen en algo que dé buen fruto.
Lo que necesitas: Caja con accesorios, grabadora y variedad de música, copia para cada joven de la hoja “Experiencia personal de un hombre sabio” y de la hoja de lecturas extras que se encuentran en la ultima parte de este estudio.
Trabajo en equipos
Con la ayuda de los lideres de grupo, crea una caja con accesorios como ropa, lentes, maquillaje, gorras, libros, revistas, etcétera. Si pueden conseguir una grabadora pueden traer una variedad de música para que los equipos la seleccionen. ¡Recomendamos que alguien se encargue de esta caja y la música para asegurar que todo sea devuelto! Tal vez, cuando cada modelo termine, tendrá que caminar por donde esté la persona con la caja y devolver las cosas en el minuto.
Divide el grupo en equipos de siete integrantes como máximo y asígnales un líder. Si tu grupo está compuesto por jóvenes y adolescentes forma los equipos con el mismo número de participantes pero también por edades (jóvenes y adolescentes).
PREGUNTA PARA CONOCERSE: Que todos compartan en sus grupos su nombre y mencionen una característica o cualidad que los distingue, empezando con el líder.
Cada equipo recibirá un estereotipo de joven para representar: Intelectual, fiestero, joven-rico, rebelde, joven-banda, idealista, pesimista. Puedes optar por otros tipos de jóvenes según tu contexto.
Que cada líder explique a su grupo que se va a realizar un “desfile de moda” mostrando como son los jóvenes de hoy y que a ellos les toca representar a un tipo de joven. Entonces van a elegir un joven o jovencita para ser el modelo y otro para presentarlo (a). Como grupo tienen que decidir:
Su nombre
Cómo se ve: que tipo de ropa usa, cuál es su marca favorita, cómo se peina, etc.
Que tipo de música escucha, cual es su canción favorita del momento
A que se dedica: en donde estudia o trabaja, cual es su mayor anhelo
Donde se encuentra en sus ratos libres, que hace para divertirse
Etcétera.
Si hay una caja con accesorios o grabadora con varios tipos de música, que algunos del grupo se encarguen de escoger algo apto para complementar la presentación del modelo.
Cuando ha pasado el tiempo indicado (15 minutos), que los modelos pasen uno por uno mientras su “presentador” explica quien es él o ella, sus gustos, trabajo, pasatiempos, etcétera. Cuando hayan terminado, agradecerles y pregunta lo siguiente:
¿Cuáles son algunos de los factores que hacen tan distintos a los jóvenes? (Posición económica, contexto familiar, preparación académica, etc.)
¿Qué tienen en común? (Todos están en búsqueda de su identidad, tienen planes y proyectos futuros, reciben la misma influencia de la sociedad)
Aplicación Bíblica
Ya en el grupo grande un líder o el líder principal debe explicar que cada uno de los tipos de jóvenes que vimos anteriormente tienen esa apariencia y esas características como fruto de algo en su vida, en general es por algo que buscan, por ejemplo el intelectual busca sabiduría, el que asiste cada fin de semana a las fiestas o reuniones busca sentirse bien u olvidarse de sus problemas. Lo increíble de la etapa de la juventud es que todavía están decidiendo que planes y proyectos van a perseguir en su vida para cosechar el fruto que quieren. Entonces es un momento muy propicio para pensar bien que quieren perseguir, en que quieren invertir su tiempo y esfuerzo.
Menciona que en esta semana van a estar analizando retos para la juventud de hoy. Pero aunque van a estar viendo problemáticas muy actuales, un hombre sabio dijo: “nada hay nuevo debajo del sol,” entonces van a complementar sus perspectivas con experiencias de personas en la historia.
Da a cada joven una copia de la hoja: “Experiencia personal de un hombre sabio” y explica que el autor, Salomón, fue un hombre reconocido por su sabiduría y que el libro de la Biblia “Eclesiastés” registra lo que él descubrió a lo largo de su vida. Cuando todos tienen una hoja y algo con lo cual pueden escribir lee, o pide que uno de los lideres de grupos pequeños lea en voz alta cada sección y luego dales unos minutos para que contesten las preguntas. Antes de seguir con la siguiente sección, pide que compartan sus respuestas.
Después pregunta:
¿Qué les parecen las conclusiones de Salomón? ¿Están de acuerdo o no? ¿Por qué?
¿Han tenido experiencias propias o han visto experiencias de otras personas que confirman o refuten lo que dice Salomón?
Cierre
Que los jóvenes se reúnan nuevamente en equipos, el líder de cada equipo explicará y guiará nuevamente esta parte de la lección.
Explica que de su propia experiencia, luego de perseguir y enfocar en todas sus habilidades y recursos, lo cual es decir mucho, Salomón decidió que la sabiduría, el placer, el dinero, el poder político y la superación personal no le dio mas fruto y satisfacción en su vida que correr tras el viento. En capitulo 4 de Eclesiastés vemos porque estas cosas no nos pueden satisfacer: dice Salomón que Dios ha puesto eternidad en los corazones de los seres humanos.
Reparta las hojas de lectura, indica donde esta este versículo de Eclesiastés y explica que personas sabias han explicado este concepto de la siguiente forma y pide que alguien lea la cita de San Agustín (…nos criasteis para Vos, y está inquieto nuestro corazón hasta que descanse en Vos) y de Blaise Pascal (El corazón de cada ser humana tiene un vació en forma de Dios, lo cual no se puede llenar con ninguna cosa creada, sino solamente con el Creador, Dios revelado en Jesucristo.) Destaca el hecho de que Dios es infinito significa que este vació en forma de Dios es tan grande que solo Dios lo puede llenar.
Pide que cierren sus ojos y imaginen el lago o el cañón más grande que han visto, o si no han visto algo así, que imaginen el cielo de noche y luego que piensen en que cantidad tan grande requeriría para tratar de llenarlo. Aun con toda la tecnología tan avanzada que existe, sería imposible llenar el espacio. Y este vació en nuestros corazones es mucho más grande que cualquier lago, cañón o aun el mar, entonces por su puesto no vamos a poder llenarlo con un poco, o un mucho, de dinero, placer o logros.
Pide que mantienen sus ojos cerrados y en el silencio que analicen sus vidas, que están buscando y con que están tratando de llenar el vació en su corazón. Después de dos minutos de silencio termina con una oración pidiendo que Dios les guía a una vida que de buen fruto para toda la eternidad.

Experiencia Personal de un Hombre Sabio

Su Proyecto:

Y di mi corazón a inquirir y a buscar con sabiduría sobre todo lo que se hace debajo del cielo; este penoso trabajo dio Dios a los hijos de los hombres, para que se ocupen en él... hasta ver qué de bueno le encuentra el hombre a lo que hace bajo el cielo durante los contados días de su vida.

Caso # 1

Hablé yo en mi corazón, diciendo: He aquí yo me he engrandecido, y he crecido en sabiduría sobre todos los que fueron antes de mí en Jerusalén; y mi corazón ha percibido mucha sabiduría y ciencia. Y dediqué mi corazón a conocer la sabiduría, y también a entender las locuras y los desvaríos; conocí que aun esto era aflicción de espíritu. Porque en la mucha sabiduría hay mucha molestia; y quien añade ciencia, añade dolor. Aumentan las palabras, aumentan los absurdos. ¿Y qué se gana con eso?

(Eclesiastés 1:16-18; 6:1)

Subraya donde dice que buscaba.

¿Qué aprende en su búsqueda? Subraya donde dice cuál es el fruto de su afán.

Caso # 2

Dije yo en mi corazón: Ven ahora, te probaré con alegría, y gozarás de bienes. Mas he aquí esto también era vanidad. A la risa dije: Enloqueces; y al placer: ¿De qué sirve esto? Propuse en mi corazón agasajar mi carne con vino, y que anduviese mi corazón en sabiduría, con retención de la necedad, hasta ver cuál fuese el bien de los hijos de los hombres, en el cual se ocuparan debajo del cielo todos los días de su vida.

Me amontoné también plata y oro, y tesoros preciados de reyes y de provincias; me hice de cantores y cantoras, de los deleites de los hijos de los hombres, y de toda clase de instrumentos de música. No negué a mis ojos ninguna cosa que desearan, ni aparté mi corazón de placer alguno, porque mi corazón gozó de todo mi trabajo; y esta fue mi parte de toda mi faena.

(Eclesiastés 2:1-3, 8, 18)

Subraya donde dice que buscaba.

¿Qué aprende en su búsqueda? Subraya donde dice cuál es el fruto de su afán.

Caso # 3

Engrandecí mis obras, edifiqué para mí casas, planté para mí viñas; me hice huertos y jardines, y planté en ellos árboles de todo fruto. Me hice estanques de aguas, para regar de ellos el bosque donde crecían los árboles. Compré siervos y siervas, y tuve siervos nacidos en casa; también tuve posesión grande de vacas y de ovejas, más que todos los que fueron antes de mí en Jerusalén.

No negué a mis ojos ninguna cosa que desearan, ni aparté mi corazón de placer alguno, porque mi corazón gozó de todo mi trabajo; y esta fue mi parte de toda mi faena. Miré yo luego todas las obras que habían hecho mis manos, y el trabajo que tomé para hacerlas; y he aquí, todo era vanidad y aflicción de espíritu, y sin provecho debajo del sol.

Asimismo aborrecí todo mi trabajo que había hecho debajo del sol, el cual tendré que dejar a otro que vendrá después de mí. Y ¿quién sabe si será sabio o necio el que se enseñoreará de todo mi trabajo en que yo me afané y en que ocupé debajo del sol mi sabiduría? Esto también es vanidad. Volvió, por tanto, a desesperanzarse mi corazón acerca de todo el trabajo en que me afané, y en que había ocupado debajo del sol mi sabiduría. !!Que el hombre trabaje con sabiduría, y con ciencia y con rectitud, y que haya de dar su hacienda a hombre que nunca trabajó en ello! También es esto vanidad y mal grande. Porque ¿qué tiene el hombre de todo su trabajo, y de la fatiga de su corazón, con que se afana debajo del sol? Porque todos sus días no son sino dolores, y sus trabajos molestias; aun de noche su corazón no reposa. Esto también es vanidad.

(Eclesiastés 2:4-7, 10-11, 18-23)

Subraya donde dice que buscaba.

¿Qué aprende en su búsqueda? Subraya donde dice cuál es el fruto de su afán.